Ingredientes Principales

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Preparación de la Receta:

Para elaborarlas necesitamos yogurt enormemente cremoso, bien sea adquiriéndo la variedad "griega" que comercialmente se nos ofrece, bien por el sencillo método de desecarlo en casa. Para ésta última operación necesitamos de un colador de tela -o un calcetín aceptablemente limpio- y verter en él cuatro o cinco yogures "naturales" (mal puedo dar la cantidad exacta porque para este proceso me hago el yogurt yo en casa). Poner el colador en una jarra o vaso alto y dejar en el refrigerador que escurra el "agüilla" que iremos retirando cuando el nivel amenace con mojar el colador. Tras uno o dos días obtendremos en el colador un yogur pastoso y maleable que es el que necesitamos para el manejo subsiguiente.
Esta sustancia la batimos con una cucharadita de sal y formamos bolitas de dos o tres cms de diámetro y las disponemos sobre un plato. Paralelamente hacemos un "mojo" machacando dos ajos, perejil, albahaca, menta y una pizca de comino con un chorro largo de buen oliva (evitar el picual pues ya el yogurt aporta un punto amargo al plato, preferible Baenas y Hojiblancas).
Aliñamos con esta salsa los boliches de yogur, espolvoreando ligeramente pimienta molida y los disponemos en la nevera para servir como entrante o bien como original canapé (que es el uso que yo le he dado) disponiendo cada bolita sobre una galletita "cracker" y adornado con una hoja de albahaca fresca. Lo inusual (en occidente) del sabor y textura de esta preparación del yogurt obliga al invitado a acercarse a interrogarte sobre el inquietante material... y con una sonrisa negarse a revelar "el secreto"... cuando ya se ponen pesados susurras al oido a uno: "es mozarella"... y el tipo dice aliviado "ahhh, claro...". Si a los cinco minutos todos los asistentes piden otro canapé de "mozarella" ya sabes a quién no le debes confiar nunca un secreto :)

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